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El jade es una roca ornamental. El término jade es aplicado a dos rocas metamórficas distintas compuestas de diferentes minerales silicatados como son la nefrita y la Jadeíta
HISTORIA
Como material se ha utilizado para fabricar utensilios y adornos desde hace más de 5000 años. A lo largo del tiempo se desarrolló un verdadero culto del jade. Los objetos de jade tenían (y tienen) fama de amuletos que atraen la suerte. En sus orígenes el jade era usado por ser duro y resistente. Por ello se utilizaba también para elaborar armas, herramientas y máscaras, como las conocidas en América como «máscara de jade».
Según la mitología china el jade provenía de un dragón. Ellos se refieren al jade como "yu", que significa "celestial" o "imperial". Por ello, es considerada la gema imperial en la cultura china. En China, se encontró jade en las tumbas de los reyes Shang.
Para las culturas prehispánicas de Mesoamérica el jade era la piedra de la creación, significaba vida, fertilidad y poder. Fue incluso más valorado que el oro. Se obtenía del valle del Montaqua en Guatemala. Esta región ha sido confirmada como la fuente de todo el jade usado por los mesoamericanos durante 3000 años.
PROPIEDADES ENERGÉTICAS
Se dice que el jade amarillo fomenta la autorealización, fomenta la riqueza de ideas y el dinamismo, es energético y estimulante, el jade es un símbolo de pureza y serenidad, muy apreciado en Oriente, simboliza la sabiduría conseguida en tranquilidad. Los minerales amarillos y ejercen un efecto estimulador y optimista, aportan suerte, despreocupación y vigor.
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